Un día tengo que contaros cómo se le ocurrió a Stevenson  la idea de escribir "La Isla del Tesoro",
pero por ahora, os dejo un minicuentecillo sobre el pirata de arriba, que pinté hace unos años, y que
es uno de los protagonistas del libro:
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"Como el pirata Long John Silver sólo tenía medio mapa del tesoro...
sólo encontró medio cofre"

Aquí tenéis el último óleo que he pintado. Se trata de uno de los más valientes jefes indios, Nube Roja, de la tribu de los sioux Oglalla. El cuadro se llama "Nube Roja en el espejo" porque, si os fijáis, veréis que he pintado a la derecha una nube roja en el cielo. Al parecer, adoptó su nombre porque su ejército, a lo lejos, parecía una enorme nube roja que cubría el paisaje.
Sabemos pocas cosas sobre su infancia. Su padre murió siendo niño y fue su tío, Humo, el que le enseñó a tensar el arco, a escuchar el idioma de los arroyos y a adivinar el color de los ojos de un coyote, sólo con mirar sus huellas.
A Nube Roja le encantaba jugar con los niños, y estos se quedaban medio hipnotizados cuando su jefe les sentaba alrededor de una hoguera y le contaba los cuentos que él había aprendido de sus antepasados.
¿No os habría gustado haber sido piel roja? Antes de que llegaran los rostros pálidos, me refiero.

Aquí tenéis a Luís Beviá haciendo esculturas de jabón

Poco a poco os iré presentando a los artistas que va a llenar de magia los teatros en el Jaje, seguro que os gustarán tanto como a mí.

Le he pedido a Daniel –sí, el mismo niño que dibujó al payaso del cartel, del que ya os he hablado- que los vaya dibujando y ha querido

empezar con Luís. Luís es un actor, guionista y director de cine y de teatro que, jugando a hacer pompas, descubrió que podía hacer esculturas con ellas. Sí, esculturas como las de los museos, sólo que en vez de hechas con hierro o con mármol, las de Luís están construidas con jabón.  No se quedan quietas para siempre, como las estatuas que adornan las plazas de las ciudades, pero a cambio, las suyas se mueven como bailarines, suben como cometas, se balancean como tentetiesos, crecen como los niños que cumplen años, se llenan de humo como las chimeneas…

Luís ha recorrido todo el planeta con su equipaje de burbujas –no sé cómo logra meterlas en la maleta-, y ha conseguido que miles de miradas se fijen en cómo el jabón puede disfrazarse de formas tan dispares. Fijaos en el vídeo que pondré ahora, ¡hasta se inventa una pompa cuadrada…!

Aquí está, sentaos cómodos y disfrutad de un viaje subidos a lomos de una pompa de jabón. El conductor de la travesía se llama Luís Beviá y nos acompañará en el Jajejijojú.